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Brigantium

Practicismo ambiental y/o el ARTE de llenar un espacio vacío.

Practicismo ambiental y/o el ARTE de llenar un espacio vacío. Los artistas de pacotilla como yo pasamos mucho tiempo de nuestra vida pensando en primer lugar si lo que hacemos es realmente arte. Luego, y a renglón seguido, en el mejor de los casos tratamos de buscar “acomodo” descriptivo a nuestro trabajo, hecho con mayor o menor arte, o dicho de otra forma: con mejor o peor fortuna.





A mi gran amigo MIGUELito le sobran las calificaciones museísticas y academicistas. Él, con la sabiduría que da la ciencia infusa, soslaya inútiles calificaciones en las que los tontos de baba solemos epigrafiar nuestra obra: SIMBOLISMO, MODERNISMO, IMPRESIONISMO, FAUVISMO, FUTURISMO, NAÏF, REALISMO, CUBISMO, PURISMO, NEOCUBISMO, EXPRESIONISMO, SURREALISMO, ABSTRACTO, NEOPLASTICISMO, OP-art, POP-art...





MIGUELito tiene una iluminación singular, exclusiva, divina y sobre todo práctica. Él, con su humildad, inventa constantemente CLASIFICACIONES más prácticas y didácticas; muchos más comprensibles al pueblo llano (ese que normalmente está en posición horizontal, jodiendo).





MIGUELito compra un cuadro de delfines solo si tiene un acuario. Si el cuadro de delfines se lo regala un amigo y no tiene un acuario, como excelente amigo que es, compra un acuario para colgar el regalo de su amigo.



MIGUELito tiene una casa de campo. Encargó a un experto en botánica medio ambiental un exhaustivo análisis de la flora circundante a su entorno habitacional. Después de ello encargó a un prestigioso pintor (de Carballo, son los mejores ) que elaborara, en función del espacio de pared disponible, el justo número de cuadros, con el exclusivo tema floral y campestre que circunda su entorno habitacional.



MIGUELito es genial, único, inigualable, el indiscutible MAESTRO en el "PRACTICISMO AMBIENTAL y/o EL ARTE DE LLENAR UN ESPACIO VACIO" .



Es, en esencia, el desiderátum de cualquier “pintamonas” como yo. Me gustaría llegar algún día a tener la visión plástica y la sublimación del practicismo artístico que tiene mi amigo MIGUELito.



A mi buen amigo le regalé un cuadro de bonitos y/o atunes (en definitiva, ¡peces del carajo!) y como no tiene, de momento, una finca marinera, metió el cuadro dentro de una lata aderezado con aceite puro de oliva, para conservarlo hasta mejor ocasión.



MIGUELito en su divina simplificación estética y plástica piensa que: “Los bonitos deben de estar en lata y los chulos en Cádiz”. ¡Ole mi niño!.





¡Carallo!, ¡vaya amigo tengo!, ¡carallo… con el amigo MIGUELito!.



A. Torres Sánchez.

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